¿Alguna vez haz imaginado tocar el techo de México? O tal vez ¿Caminar a más de 5,636 metros sobre el nivel Del Mar? Qué tal ¿Conocer el único glaciar de  México? 

¿Te gustaría tener una vista donde ningún edificio, montaña, persona puede estar más alto que tú?

Subir el Pico el Orizaba es una interesante prueba de paciencia, concentración y dedicación, donde solo las personas mejor preparadas física y mentalmente logran  llegar a cumbre, a lo más alto de México, ese lugar donde nadie ni nada puede tapar tu mirada, una vista panorámica de 360 grados. 

La experiencia comienza saliendo a las 5 de la mañana en la ciudad de Toluca con una de las mejores promotoras en el país Coyote Outdoor, de allí nos dirigimos a CDMX por mas montañistas que se quieren sumar a esta gran aventura, recorremos 3 horas en autopista hasta llegar al último poblado Tlalchichuca, aquí ya nos esperan para desayunar, bajar nuestras maletas de la van que nos llevo hasta allí, mandar mensajes a familia pues después de este punto no tendremos señal, subirnos a vehículos 4×4 y así continuar nuestro camino por dos horas de barrancas, un gran bosque hasta la entrada del Parque Nacional Pico De Orizaba, llegamos a las 13:00 horas al refugio de piedra grande donde allí acamparemos, comeremos y con nuestro guías haremos una caminata de aclimatación, pues es importante para aclimatar a nuestro cuerpo ya que estamos a 3,700 metros sobre el nivel del mar, la respiración empieza a agitarse, te agotas mas rápido de lo normal, pero la vista, la emoción de estar allí nadie te la quita, recuerdas porque estás, y a donde quieres llegar. 

Es hora de dormir a las 18:00 horas de la tarde pues el plan es subir a las 01:00 am, pues es un recorrido de 7 o 8 horas cuesta arriba nos espera, el clima cambia de una manera muy rápida, la lluvia empieza en su mero apogeo antes de nuestra aventura. Todo está listo para subir, nuestros guías nos desean éxito, nos piden no nos separemos, la mochila con 2 litros de agua, comida, chamarra, trampones, piolet, y todo lo esencial para poder subir. 

El camino empieza, el frío que en esa mañana era de -8 grados se empieza a olvidar rápidamente, pues el pico de Orizaba a diferencia de otros volcanes todo es muy empinado, pasas por el primer tramo, un camino que a la vista aún no tiene nieve, tu mejor amiga en ese momento es tu lámpara, después d runa hora de camino descansas 5 minutos, comer dulces y tomar agua, para continuar, sigues avanzando mientras que tu guía, te da ánimos para seguir dando lo mejor de ti, así pasó hasta llegar al punto de descanso donde tienes que ponerte tus crampones, pues la nieve es espesa y todo camino te acompañará, de pronto miras hacia arriba y ves a otros montañistas muy lejos de ti, en ese momento tu mente te dice ya no puedes, tu cuerpo aún puede subir, pues solo han caminado 4 horas, recuerdas tus propósitos, tu familia, tus hermanos, tus abuelos, y la naturaleza es tan bella que de pronto empieza a nevar, lo más hermoso, tu mochila, la chamarra, se llenan de nieve…

Sigues avanzando por caminos rocosos, de pronto paras un segundo, y te das cuenta que la montaña te da mucho, pero también te exige demasiado, vuelves a voltear hacia arriba y solo ves a la distancia focos de las lámparas de los demás muy lejos de ti, es allí cuando dudas si podrás subir o no, pero cuando tienes a guías tan preparados, que se preocupan por ti, es una experiencia inolvidable, de pronto los colores del amanecer muy ligeros se hacen ver pues son las 05:00 am, aún falta mucho para llegar a lo más alto de México, la cabeza empieza a punzarte, de pronto ves a muchas personas bajar pues su cuerpo, su mente se los exige, a mayor altitud más falta de oxígeno, en ese momento piensas si continuar o mejor bajar, el agotamiento es intenso, el dolor de cabeza es fuerte pero no permites rendirte.

A las 06:00 am llegas a la base del glaciar de Jamapa, lo más hermoso que has visto hasta el momento, pues la hora aún no permite verlo completamente, el sol empieza a salir, faltan 800 metros para llegar a cumbre, es momento de amarrarte con tu guía, sacar el piolet, dar un gran respiro y avanzar, pues es la parte más inclinada de todo el pico de Orizaba, aquel glaciar que pensaste subirías muy rápido se hace eterno, cada paso, cada suspiro un minuto más, 3 horas para avanzar, volteas hacia abajo y piensas llegue tan lejos como para rendirme aún, las lagrimas empiezan a salir mientras se va acercando la cumbre.

Alcanzas a ver esa cruz que es representativa del pico, tus guías te dicen si puedes, el último jalón, y de pronto ¡¡LEGASTE!! Estás en lo más alto de México, donde ningún edificio, persona, nube puede taparte la mirada, agradeces y recuerdas todas esas metas que tenías, porque estás allí, agradeces al gran equipo que te acompaño, a cada persona que te permitió estar allí, a tu familia, a lo más hermoso del momento, te das cuenta que lo más increíble es respirar y que con esfuerzo, dedicación, todo se puede lograr, estás aquí, hoy es el presente mañana no sabemos si llegaremos a estar, pero mientras tanto solo te queda disfrutar de lo grande que es México, de la gran meta que acabas de cumplir.

“No sueñes por soñar, sueña por alcanzar porque los sueños están para cumplirse.”