La Ferrari 296 GTB, el nuevo rostro de la velocidad
Ferrari, la definitiva expresión de lujo y exclusividad automotriz, il cavallino rampante se atrevió a revolucionar el esencial espíritu de la berlinetta biplaza, y lo ha logrado sin trastocar el espíritu deportivo que lo distingue. Es Ferrari, es el sonido y el bólido rojo que se dibuja ante los sorprendidos ojos del espectador que reconoce la marca y el abolengo, solo que ahora con nuevo nombre 296 GTB.
La marca de Maranello no sabe hacer las cosas a lo pequeño, y es lo lógico después de construir las bases del deportivo italiano que llegó para impactar de manera permanente la historia del automovilismo global.
Pero, ¿por qué es tan revolucionario este auto?, bien; resulta que es el primer Ferrari de serie equipado con motor turbo de 6 cilindros dispuesto a un ángulo de 120 grados que permite equiparlo con dos turbocompresores en V… y además es híbrido.
Se trata de una práctica idea que en conjunto permite gran poder en una dimensión verdaderamente compacta. Es el sueño de la ingeniería aplicada, el resultado de miles de horas de trabajo en el taller de diseño, y que ahora, se ve convertido en una espectacular realidad. El 296 GTB cuenta con una potencia única para un automóvil de serie, que lo lleva hasta los 663 CV; lo que lo convierte en un verdadero portento.
El estilo italiano en el diseño es innegable, pero también la lógica que se espera de un Ferrari, con suaves líneas que recorren la enérgica estructura en la comprobación de la saeta que ante el viento tiene muy poca resistencia. Por eso es ágil pero muy certero y firme.
Es una línea compacta con motor central trasero y de cabina con amplio espacio que denotan la atención a uno de los detalles que atraen cada vez más exigencia. Ferrari trae así, un auto rápido pero musculoso, producto de la convicción que significa romper tus propios límites, lo que, si bien es algo esperado en las grandes marcas, cuando hablamos de Ferrari, tenemos que admitir que son avances que se producen para impulsar de nuevo a toda la industria. Toda.
Esto permite el arribo de nuevos dispositivos aplicados como el controlador ABS Evo, la última palabra en cuanto a agarre se refiere, lo que dota al nuevo integrante de la afamada familia italiana de una notoria presteza en todos los ángulos; con su facilidad de manejo que se traduce en una clara sensación de reactividad, la constancia y respuesta inmediata sobre las curvas, alta eficacia en la modulación del pedal de frenado, que es firme pero sin llegar a ser agresivo, además de su tipo de cambio que es también altamente eficiente con una perfecta respuesta en la progresión, lo que permite en conjunto tener a la mano una de las más altas experiencia de manejo.
Esto evidentemente, se ve potenciado por la tecnología a bordo, que abona de manera muy puntual a esta experiencia multisensorial detrás del volante. Y es que no solo recibes la sensación de un control total, sabes que lo tienes en todo momento, incluso bajo el modo híbrido que mantiene apagado el motor de combustión hasta los 135 kilómetros por hora.
Es rápido al acelerar y certero al frenado, poderoso en la velocidad, pero amigable con el medio ambiente, esto gracias a su batería con una capacidad de 7.45 kWh, lo que le da una autonomía 100% eléctrica de 25 km.
Pero no te dejes engañar, es un híbrido con alma indomable que puede llevarte de los cero a los 100 kilómetros por hora en tan sólo 2.9 segundos.
Y al ser este un coche de vanguardia, por supuesto que hace alarde de tecnología aplicada en beneficio del usuario con interfaz Full Digital que como es sabido fue desarrollada para el SF90, sin embargo, a diferencia que en su lanzamiento cuya misión fue hacer notar el aspecto digital en cada uno de los apartados, aquí agrega una exigencia adicional; hacerlo elegante.
Así, los instrumentos se acoplan como debe de ser al alcance ergonómico del conductor, solo que ahora, también el asiento del pasajero cuenta con pantalla de acceso al panel, para que sea más que un acompañante, un copiloto.
Los controles se integran de manera muy natural y predictiva, convirtiendo la experiencia de viaje en un renovado sentido del transporte, uno que tiene que ver con miles de horas de diseño y toda una vida de experiencia. Es Ferrari, es el feroz caballo haciendo lo que mejor sabe hacer; impresionar.