Yanni Chryssomallis La potencia de la orquesta

El músico, compositor, instrumentista y director, ha sabido extraer de la orquesta toda la potencia revestida de un estilo incomparable, haciéndose así de su propio escenario, uno donde lo clásico se funde con lo tribal, donde el solo del violín anuncia la tempestuosa llegada del sintetizador.
Yanni Chryssomallis, o simplemente Yanni, como es reconocido, es griego de nacimiento, pero ciudadano del mundo por adopción. Es oriundo de la iconica ciudad de Kalamata, ahí creció como un niño habido de la expresión musical, con pocos años ya tocaba el piano y el violín, aunque fue la psicología la que le dio el deseo por salir de su pais y mudarse a Estados Unidos para licenciarse en la Universidad de Minnesota.
Pero la música no se alejaba del joven interprete, que invariablemente se encontró reuniendo a un pequeño grupo de músicos
para algunas presentaciones locales, de ahí nació Chameleon su primera agrupación con la que mantuvo algunas giras de Rock, alrededor de las ciudades cercanas con moderado éxito.
Para Yanni la música siempre ha sido parte de su vida, de tal manera que, aun siendo profesional de la psicología, finalmente se decantó por las partituras buscando un nuevo estilo, un sonido que le llenara el oído como ya le llenaba la mente.
Así comenzó a componer lo que muchos han tratado de darle la notación de New Age, aunque él ha insistido en que su música es más bien instrumental contemporánea.
Es un músico referencia, multilaureado, sus composiciones han trascendido los escenarios para encontrar buen resguardo en sountracks de películas, series televisivas y comerciales.
Trascendía la llegada de los años 90, y la espectacularidad de sus obras requería un marco igualmente portentoso, él lo sabía, por eso centró sus intenciones en la acrópolis griega por antonomasia, la Acrópolis de Atenas.
Ahí montó un escenario, lo bañó de luces multicolor, lo alimentó con una espectacular orquesta y tocó…
su música hizo entonces eco global, todos reconocimos entonces a Yanni, el video editado en 1994 llegó a todas las naciones y prácticamente todos los hogares lo repetían sin parar.
Así, Yanni entraba por la puerta grande, llegando para quedarse. 12 conciertos en vivo grabados en video, 16 álbumes de estudio, más de siete soundtracks y un sinfín de presentaciones que el público cataloga como uno de los más grande espectáculos musicales.